Publicado: noviembre 26, 2024
Paola Amador Segura, la única sobreviviente del accidente aéreo en el Cerro Pico Blanco, Escazú, que cobró la vida de cinco personas, se encuentra en condición estable, según informó Miguel Ángel Villalobos, jefe del servicio de Emergencias del Hospital San Juan de Dios. Paola, de 31 años, fue ingresada al centro médico la mañana de este martes, luego de ser rescatada tras más de 14 horas de esfuerzos en condiciones adversas.
Lesiones bajo evaluación
De acuerdo con Villalobos, la paciente llegó consciente, con signos vitales estables y sin lesiones que comprometan su vida de manera inmediata. “Aunque presenta escoriaciones, contusiones y traumas en las extremidades, la evaluación inicial no indica la necesidad de una cirugía de emergencia”, detalló el especialista.
Actualmente, Paola está siendo sometida a una serie de exámenes médicos, que incluyen tomografías, ultrasonidos, radiografías y análisis de sangre para determinar el alcance total de sus lesiones. Aunque inicialmente se reportaron fracturas, los resultados de los estudios médicos serán determinantes para confirmar su estado.
“Intervención divina”, según el médico
Villalobos destacó el carácter extraordinario de la sobrevivencia de Paola, considerando las condiciones del accidente y el tiempo que pasó sola antes de ser rescatada. “Definitivamente, hubo intervención divina. Es sorprendente cómo llegó en una condición tan estable después de una tragedia tan devastadora”, comentó.
Atención integral para su recuperación
Paola está siendo atendida por un amplio equipo médico del hospital, que incluye especialistas en medicina de emergencias, cirugía general, ortopedia, traumatología y enfermería. Además, una vez completada la valoración inicial, recibirá soporte del equipo de salud mental y psicología, tanto para ella como para su familia.
Por ahora, permanecerá bajo observación en el área de emergencias, y el tiempo que requiera en el hospital dependerá de los resultados de los exámenes y la evolución de sus lesiones.
Contexto del accidente
El monomotor Cessna 206, matrícula TI-GER, partió desde Barra del Tortuguero con destino al Aeropuerto Tobías Bolaños en Pavas. Sin embargo, debido a las malas condiciones climáticas, la terminal fue cerrada, obligando a los pilotos a desviar el vuelo hacia el Aeropuerto Juan Santamaría. Fue durante esta maniobra que la aeronave desapareció del radar el lunes al mediodía, terminando en un trágico accidente.